¿Y tú qué andas buscando?

Me contó una buena amiga una emocionante historia sobre su añorado padre, y de como siendo muy pequeño tenía tal ansia por leer y tan poco a mano para hacerlo, que se dedicaba a buscar papeles que alguien hubiera tirado en el suelo, para encontrar nuevas palabras que interpretar y que le llevaran al ansiado mundo de la lectura.

Eso me hizo pensar en la importancia que tiene el interés y la dedicación para lograr lo que se quiere. Porque no es un secreto que, si empiezas algo sin verdadera motivación, normalmente se queda a medio hacer; en cambio, cuando aquello que buscas o necesitas es fundamental para ti, te dejas la piel en el empeño.

Quizá no buscas palabras en un papel olvidado, pero sí risas frescas, abrazos añorados, besos nuevos que te sorprendan, o despertar a los sueños olvidados.

Busca, con el mismo interés que ese pequeño, aquello que anhelas, sabiendo que lo que buscas no vendrá a ti, si tú no vas antes a por ello.

Hay que levantar alfombras para sacudir las creencias acumuladas, hay que ventilar para que se nos agite la conciencia, hay que moverse del sillón para ir paso a paso a por todo lo que seguramente será el fruto de una creación propia, porque todo empieza en uno mism@.

Si deseamos reírnos con fuerza, con la diversión auténtica que hace olvidar las penas o ponerlas momentáneamente entre paréntesis, deberemos buscar amigos divertidos o gente con el buen humor por bandera, que la hay. Si ansiamos volver a abrazar a buenos amigos o familia a la que hace tiempo no vemos, dejemos de postergar la llamada, para que el encuentro se realice lo antes posible. Si necesitamos besos nuevos, abrámonos al mundo para explorar nuevas amistades o posibles parejas que nos llenen. Si vivimos sin ilusiones rescatemos la mirada creativa que nos permita inventar un sueño por el que trabajar.

Nada aparece porque sí, sin más.

Hay que estar en el lugar adecuado, con la predisposición de hallar ese tipo de felicidad, porque si simplemente navegas en el mar de la rutina, te atrapará la apatía y soltarás el timón, para que la vida te lleve a ti, y no a la inversa.

Te diría (como me recuerdo a mí misma, a diario): mueve primero un pie y luego el otro, o sea, yendo paso a paso en la búsqueda, porque las pequeñas acciones que parecen no llevar a ningún lado tienen el poder de ejercer pequeños giros en la vida, que corrigen la trayectoria y nos llevan a otro horizonte más acorde con lo que deseamos, como también explicaba en el pasado post de las almas perdidas.

Antes de buscar excusas para la inacción, encontremos motivos para la acción.

¿Os cuento como siguió la historia de ese niño? Que toda su vida buscó la belleza a través del arte. Lo que empezó con la lectura siguió con la pintura (me enamoraban sus cuadros al óleo) y también la fotografía. Era autodidacta, como tanta gente que suple con su don innato una carrera artística. También creó una pequeña empresa de peluches, que diseñaba y confeccionaba con la ayuda de su familia. Es decir, su curiosidad infantil no era más que la demostración de una mente inquieta que podía hacer grandes cosas. Puede que no se hiciera famoso, en un tiempo sin redes sociales y mucho menos medios, pero dejó una herencia de cosas bonitas y recuerdos maravillosos. Estoy convencida de que no hay mayor logro que ese.

Yo, como ese pequeño, también busco palabras, aunque de otro modo. Con ellas intento crear algo especial que conecte con vosotr@s, para que, si no llego a ser escritora profesional (reconozco que es un objetivo complicado), pueda dejar un halo bonito de historias y reflexiones escritas con el corazón, porque sean en papel o digitales, si quedan en la memoria de quienes las leen, también serán imperecederas.

No soy yo quien desea la noche,
sino quien la claridad persigue
con el alma entregada a la esperanza.

@la_vida_encantada

Fotografías. Imagen 1 mujer entre flores ThuyHaBich – Imagen 2 chica con lupa PublicDomainPictures – Imagen 3 chica con maleta José Antonio Alba – Imagen 4 libro con faro PIRO4D a través de Pixabay.

¡Hasta el próximo Post!

Elena Tur

6 comentarios en «¿Y tú qué andas buscando?»

  1. Tus palabras hacen que lo difícil parezca fácil…..gracias!!! ⚘
    Que difícil me parece hacer realidad mis sueños, ojalá pronto dejen de serlo y pueda vivirlos

  2. Qué grata sorpresa las palabras de este mensaje… Y que bonita historia!! Orgullosa de ese niño y estimado padre, como también de tí, por hacernos sentir a través de vuestros dones… Gracias. Y no dejes de perseguir tus sueños. ♥️:)

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